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ANÁLISIS DEL CICLO DE VIDA DE NUESTRAS TOALLAS

La Tierra no puede sostener nuestra constante necesidad y sobreproducción de recursos, por lo que es hora de consumir menos cantidad y mucha más calidad.

Por eso decidimos analizar el ciclo de vida de nuestras toallas. Teniendo en cuenta que, para saber si un producto es sostenible, tenemos que fijarnos en toda su vida útil y no solo en sus materiales.

Nuestras toallas de 50x95cm tienen una huella de carbono equivalente a 2,70 kg de CO2.

¿Qué significa esto? La huella de carbono de la toalla se reduce en un 21% cuando utilizamos energía renovable y material reciclado. En otras palabras, el impacto que tiene en el planeta durante su fase de producción y uso es un 76% menor que el de una toalla de algodón of the same dimensions. Y también ayuda al consumidor a ahorrar en muchos aspectos diferentes, como energía, agua, jabón y espacio.

Ahora que tenemos todos los datos, podemos analizarlos y planificar su mejora. Para ello, primero tenemos que reducir nuestro impacto, y luego, compensarlo que no podemos reducir.

Nuestras toallas están hechas de 100% poliéster con un 30% de rPET reciclado. Usar tela sintética es una forma de evitar producir fibras naturales que necesitan campos para crecer. Utilizar materiales reciclados es una forma de evitar producir más recursos y reutilizar los residuos que ya hemos creado.

MATERIALES

Nuestra fábrica de Arenys de Munt dispone de placas solares propias, por lo que funciona con energía 100% renovable, con un menor impacto en el planeta.

MANUFACTURING

Distribuir por carretera o por mar contamina mucho menos que por avión, por eso tratamos de evitar este tipo de transporte. Se consideró el 98,4% por carretera y el 1,6% por agua.

DISTRIBUCIÓN

Estimamos unos 150 lavados (que no es el máximo) y un proceso de secado industrial. Comparamos los resultados con una toalla de 100% algodón y reportamos grandes ahorros con nuestra toalla: 58% menos energía, 55% menos agua y 40% menos jabón.

USOS

Si bien las toallas son reciclables, consideramos que la mitad terminaría en un vertedero y la otra mitad en una incineradora. Con el packaging, el 42% sería reciclado, el 21% en un vertedero y el 37% incinerado.

CICLO DE VIDA